MORLEs en el Pirineo

Los deslizamientos de tierra múltiples, tambien conocidos como MORLEs por su traducción en inglés (Multiple Ocurrance of Regional Landslide Events), corresponden a la aparición simultánea de un gran número de deslizamientos superficiales después de episodios lluvias intensas y afectan simultáneamente amplias zonas del territorio (Figura 1) (Crozier, 2005). 

Figura 1. MORLEs desarrollados en Wanganui-Manawatu, Isla Norte, Nueva Zelanda entre el 15 y el 17 de febrero. 2004, foto: Graham Hancox (Crozier 2005)

El área afectada por MORLEs puede variar de varios centenares a miles de kilómetros cuadrados, dependiendo de la extensión espacial de la precipitación. El carácter múltiple de los eventos y su simultaneidad con el riesgo de inundaciones que afectan servicios básicos, vías de comunicación y limitan la capacidad de intervención de los servicios de rescate condicionando altamente su gestión. Los daños extensos sobre personas, bienes, infraestructuras y actividades plantean además la cuestión de la resiliencia post-crisis del territorio. En este contexto, la reducción del riesgo MORLEs se basa esencialmente en la predicción temporal de eventos múltiples y la simulación de escenario de crisis. Esto requiere establecer correlaciones entre las características de las precipitaciones y la producción de MORLEs en zonas con distintos contextos geológicos e hidrográficos.

El destastre de Biescas (Huesca, España) es uno claro ejemplo del potencial de daño de MORLEs en el Pirineo. La inundación de escombros occurrida en Biescas el 7 de agosto de 1996 fue desencadenada por un evento de lluvia muy intenso y de corta duración (aproximadamente 150 mm /h en 30 minutos) en una cuenca de drenaje pequeña (19km2) (Riosalido, 1996). La repentina inundación cargada de sedimentos alcanzó al abanico aluvial alimentado por el Barranco de Arás en el valle del río Gállego y devastó el cámping de las Nieves (Figura 2), causando 87 muertes y dejando 187 personas heridas (Ayala, 2002). La alta carga de sedimentos de la inundación de escombros se relacionó con la falla de numerosas represas en el Barranco Arás.

Figura 2. A la izquierda, portada del periódico "El País" tras el desastre de Biescas (8/9/1996), a la derecha, fotografia del campamento “Las Nieves” devastado tras la inundación de escombros.

Se conoce que el Pirineo experimenta crisis MORLEs catastróficas aproximadamente cada 30 a 40 años pero pueden existir crisis en un menor grado a intervalos de tiempo más cortos.  Durante el siglo XX, varios eventos MORLEs ocurrieron conjuntamente con inundaciones extremas:

  • Molló-Queralbs (Octubre de 1940): El denominado “Aiguat de 1940” fue un episodio de lluvias torrenciales que tuvo lugar entre el 16 y el 20 de Octubre de 1940 en el sector oriental de los Pirineos, afectando tanto las vertiente norte francesa como la sur y provocando inundaciones devastadoras. Las cuencas afectadas fueron fundamentalmente las de los ríos Ter, Muga y Fluvià en la vertiente Sur y las del Tec, Tet y Agli en la vertiente Norte. El episodio de la vertiente francesa fue descrito por Pardé (1941) y posteriormente, con mucho más detalle, por Soutadé (1993). Oficialmente se registraron 840 mm de lluvia sólo contando el 17 de octubre, registro que le convierte en el récord de precipitación registrado en Europa en 24 horas y se estima que la crecida del río Tet en Perpignan alcanzó los 3000 m3 /s (Soutadé, 1993). El número de víctimas alcanzó los 350 muertos, 60 de los cuales pertenecian a la población de Torelló en la cuenca del río Ter.

Coincidiendo con las lluvias tuvieron lugar cientos roturas en las laderas, especialmente en los alrededores del macizo del Canigó, en la vertiente Norte. Las laderas recubiertas de coluviones fueron prácticamente desmanteladas por corrientes de derrubios (“xalades” en terminología local) y también los depósitos de origen morrénico (Figura 3a).

Figura 3. a) Rotura de los depósitos morrénicos en la cuenca de los Cortalets producida en los eventos de Octubre de 1940 y 1970, macizo del Canigó (Francia) y proximidades de Vernet-les-Bains b) antes y c) después del aguacero de 1940. Formación de barras de bloques y gravas y ensanchamiento del lecho (régimen trenzado). (Fuente: Portilla, M. 2014).

La gran cantidad de sedimentos arrastrados por los barrancos, alcanzó las zonas habitadas situadas aguas abajo generando importantes depósitos de acarreos como los observados en la localidad de Vernet-les-Bains (Figuras 3b y 3c).

  • Barruera-Vielha (Agosto de 1963): La información disponible del evento de Agosto de 1963 es imprecisa e incompleta. El evento, aunque tuvo consecuencias notables para la economía local y sobre la infraestructura, tuvo relativamente poca repercusión en los medios de comunicación de la época. La baja densidad de estaciones meteorológicas existentes en la región es una dificultad añadida de cara a la reconstrucción del episodio de deslizamiento. El área afectada se extendió fundamentalmente por el Pirineo Central, comprendiendo las cuencas altas del río Garona, la Noguera Ribagorçana y el río Ésera. Aunque el episodio lluvioso duró más de una semana, las lluvias de mayor intensidad se recogieron el sábado 3 de agosto y se repitieron el día 5. Los daños fueron de consideración en Valarties, en la cuenca del Garona, la cubeta de Bono en la Noguera Ribagorçana y en Benasque en la del Ésera. 

​El sector de Barruera- Vielha tiene características de alta montaña pero a diferencia del de Molló-Queralbs, una parte importante de las roturas y materiales movilizados corresponden a depósitos morrénicos (Figura 4) situados a varios cientos de metros por encima del fondo de los valles. La infiltración del agua de lluvia junto con la erosión superficial propician la formación de deslizamientos rotacionales y su canalización como corrientes de derrubios.

Figura 4. Detalle del depósito morrénico de Erill-la-Vall (Foto: J.Corominas, Fuente: Portilla, M. 2014).

Para el inventario de deslizamientos, se realizó la interpretación de las fotografías aéreas de 1975 que posteriromente se corregió con las fotografías aéreas del Servicio Geográfico del Ejército (1956/57); las cicatrices que ya existían en éstas últimas fotos, o la extensión de las cicatrices que no coincide con la observada en las fotografías de 1975, se descartaron como generadas por las lluvias de 1963. El inventario de quedó conformado por 105 roturas distribuidas en un área de 504 km2.

  • Berga-Cercs (Junio de 2008): Las lluvias que tuvieron lugar en el área de Berga-Cercs entre el 31 de mayo y el 6 de Junio de 2008 generaron múltiples deslizamientos superficiales (Figura 5a) y al menos dos flujos de tierra, de los cuales uno llevó a la interrumpción de la vía C-16 a la altura del portal norte del túnel de Berga (Agencia Catalana de Noticias, 2008) (Figura 5b).

Figura 5. a) Deslizamientos superficiales en la antigua carretera Berga Cercs, y b) flujo de tierra en el portal N del túnel de Berga (Fotos: J. Corominas, 7 de Junio de 2008, Fuente: Portilla, M. 2014).

  • Borrasca Gloria (Enero 2020): La Borrasca Gloria tuvo lugar del 19 al 21 de enero de 2020, siendo el temporal más duro y excepcional que ha sufrido España y el sur de Francia desde el episodio de enero de 1982. En todo el Estado Español la borrasca dejó un total de catorce muertos, 83 heridos y cuantiosas pérdidas materiales (sólo en el Maresme se estimaron en más de 40 millones de euros, por ejemplo, dos puentes del Río Tordera fueron derribados en Malgrat de Mar). Los principales fenómenos catastróficos de la borrasca fueron el fuerte oleaje y las intensas precipitaciones (>400 l/m2 en el área de Montseny), los que desencadenaros inundaciones torrenciales y movimientos de ladera. Durante la borrasca se inventaros numerosos incidentes ocasionados por deslizamientos de tierra de diversos tipos y magnitudes, como el desprendimiento de la carretera BV-5301 en el municipio del Brull, que cortó el acceso al Montseny, durante días, donde viven unas 17 personas (Figura 6). 

Figura 6. Colada de barro y piedras cortando el kilómetro 17,5 de carretera BV-5301 (Montseny, Vallès oriental). El Govern de la Generalitat invirtió  más de medio millon de euros en la estabilización de los taludes de esta carretera. (Fuente: ICGC).

Los efectos de la borrasca Gloria tuvieorn un efecto prolongado en el tiempo. En particular, la saturación de los aquiferos durante el temporal favoreció la ocurrencia de mútiples deslizamientos de tierra a causa de lluvias torrenciales en los meses posteriores a la borrasca (Figura 7).

Figura 7. a) Rotura del asfalto de la calle de la mosca en Calabuig Bàscara (Fuente: Ayuntamiento de Bàscara) y b) carretera BV-2041 (Begues) cortada debido a los desprendimientos desencadenados por las intensas lluvias del 21-22/04/2020 (Fuente: ICGC)

Para más información sobre MORLEs en el Pirineo consultad la monografía PyrMove sobre MORLEs históricos (en preparación)